lunes, 21 de mayo de 2018

¿Y QUÉ HAREMOS CUANDO LO DESCUBRAMOS TODO?

Será como siempre, y como siempre aplicaremos el principal menú con que hasta ahora nos hemos alimentado: AJO, AGUA Y RESINA. Creo que ya lo sabéis, pero por recordar que no sea: A JODERSE, AGUANTARSE Y RESIGNARSE.

Descubriremos, por ejemplo, cómo se financiaron determinadas cosas de carácter institucional, también de determinados partidos políticos. Descubriremos que la ilusión de muchos españoles fue un juego sucio para muchos. Descubriremos que muchas personas en este país se enriquecieron de manera totalmente ilegal, además de grosera y violenta. También descubriremos que aquellos que se enriquecieron a costa de los españoles y de manera soez, incluso criminal, nos dan la espalda y se llevarán sus sucias e ilícitas riquezas fuera del país.

Por supuesto que descubriremos que tendremos que pagar deudas que ni siquiera sospechábamos, deudas que nos endiñaron sin haber tenido el más mínimo conocimiento durante todos estos años.
Y qué duda cabe sobre la complicidad que existió durante todo este tiempo, en toda esta suerte de sorpresas desagradables y de mal gusto, por parte de determinadas formaciones políticas, empresariales y/o jurídicas.

La mentira permanente y sus complicados vericuetos serán noticias difíciles de digerir, sobre todo cuando descubramos que no solo existieron las que ya conocemos, sino que aparecerán otras mentiras que ahora mismo ni sospechamos. Es decir, que la cosa va a ser de un escándalo tan monstruoso y de tal esperpento, que a algunos les entrarán unas enormes ganas de hacer algo más que seguir llevando una vida en apariencia feliz y en un modo de vivir supuestamente tranquilo.

La comprensión sobre la dimensión de la catástrofe que estamos viviendo no está al alcance de casi nadie, menos aún del que escribe. Es por esto que pienso, auguro y vaticino, que las consecuencias de ciertos descubrimientos no va a ser del agrado de casi nadie. Eso sí que lo sé, o al menos lo intuyo.

En estos momentos en España se están ocultando muchas cosas que forman parte del entramado engañoso y fraudulento en el que estamos inmersos hasta las cejas. Tratan de taparlo todo porque saben que cuando todo se descubra no sucederá nada más allá de cierto grado de indignación ante la nefasta sorpresa que traerán las malas noticias. ¿Por qué creemos que magnifican ciertas noticias y que se inventan otras más, si no es para tapar y esconder, para desviar y para distraer? Es el caldo en el que nos vienen dadas más de siete tazas al día. Y tragamos. Y mientras deglutimos, ellos siguen pergeñando para sostener todo este estado de cosas con la mentira de fondo sin que apenas se perciba su presencia.

Y todo esto en el plano político y empresarial de este país, pero aún nos queda otro aspecto a tener en cuenta, pues los medios de comunicación (mucho, no todos, pero sí muchos), han contribuido a difundir la mentira y a hacerla presente en nuestras vidas todo los días, a cada instante, en cada momento en que fuera necesaria la colaboración de esos medios.

¡Ay el día en el que España entera se entere de lo que pasó durante tantos años!
¡Y ay el día en que España entera se entere de que, lo que pasó, tuvo unas consecuencias que serán irreversibles, casi de por vida!

Preparad para ese día mucho AJO, mucha AGUA, y mucha RESINA.
¡Ah, y no nos olvidemos de un buen carro para llevarlas!
Lo que ya no sé, es si vamos a tener mucha paciencia, o si se nos habrá agotado por el camino.

Eso no lo sé.

Tititokokoki