miércoles, 9 de mayo de 2018

LA CONCIENCIA


Es evidente que la conciencia existe, y dejando al margen ramificaciones o reminiscencias religiosas, la conciencia juega un papel importante en nuestras vidas, las vidas de los seres humanos. Pero, ¿tienen todos los seres humanos la misma conciencia? ¿Hacen uso de ella en la línea, misma proporción, intensidad y creencia? Es evidente que no, porque coexisten dos conceptos claramente diferenciados de conciencia: LA BUENA, Y LA MALA. Y de cada una de estas dos formas de conciencia, surgen usos que en ocasiones son fatales.

Y ambas son humanas, pues son usadas por humanos. Y de ahí que las cosas estén como están.
No existe una conciencia universal. Cada quien piensa a su manera y ejecuta sus pensamientos también a su manera, pero la diferencia de su uso es muy gorda cuando lo que se hace no cuadra ni coincide con el verdadero pensamiento, sobre todo cuando el pensamiento bueno se transforma en una ejecución de ese pensamiento en algo malo. Ahí saltan auténticas chispas y surgen situaciones que, en ocasiones, acaban por dar al traste con la propia vida de aquella persona que no quiso, no pudo, o sencillamente no le dejaron, usar su conciencia. Fruto de la infidelidad a la conciencia, ha habido suicidios. Y asesinatos, también.

Pues bien. La conciencia juega en nuestras vidas un papel muy importante y trascendental. Porque no solo es nuestra propia conciencia, sino que se trata de que estamos influidos, negativa o positivamente, por las decisiones que toman otros, sean estas fruto de una conciencia buena, o de una conciencia mala. Y lo peor de todo, es que esas decisiones pueden haber sido tomadas por una conciencia mala pero salió de un pensamiento contrario, o viceversa.  

Y aquí entran las personas que tienen poder. Jueces, Fiscales, Políticos, empresarios............
¿Tienen conciencia estos? Y si la tienen, que es lógico que así sea, ¿es buena o es mala? ¿Coincide la decisión tomada con su conciencia?

Es evidente que mucha gente no vale para ser cualquiera de los mencionados, porque su conciencia no se lo permite, pero también es cierto que existen personas que se meten a realizar cualquier labor de las mencionadas, aún a pesar de sus conciencias. Y no sé qué será peor, si una persona que contradice a su conciencia desde cualquier estado de poder, o si realmente su conciencia es la que revela la calidad baja o ruin de sus decisiones. Y la cantidad, también.

Sobre la conciencia y su uso, caben muchas preguntas. Porque, ¿qué les ocurre a los que ostentan poder cuando toman decisiones que van en contra de sus conciencia? Y lo peor de todo, ¿tienen y mantienen su conciencia cuando ven las consecuencias de las decisiones que han tomado?
Pero aún más que va más allá de lo peor. Y eso es cuando la conciencia de los poderosos, es mala.
Y creo que en eso radican todos los males que nos afectan y nos aquejan. En las malas conciencias o en aquellas que, aún siendo buenas, no pueden, no quieren, o no les dejan hacer las cosas en base a su conciencia. Y todo hay que decirlo. En la política, en la judicatura, en la empresa o en cualquier otro lugar de poder, en ocasiones la conciencia es buena pero tienen que tomar decisiones contrarias. En otras es mala, y hay casos en los que aparenta no existir conciencias.

Y en esas estamos, con la conciencia desaparecida, y en ocasiones mal, muy mal usada.



Tititokokoki