viernes, 28 de septiembre de 2018

¿DEMOCRACIA, O QUÉ?


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En los días que vivimos, y desde hace ya mucho tiempo, la Democracia alcanzó grados de prostitución y de degradación tal altos y definitivos, que la han llevado a un estado de deterioro tal, que ya podemos decir que en España, y en buena parte del resto del mundo, la Democracia desapareció a causa del maltrato sufrido y a causa también de la falta de respeto y de coherencia con los principios más fundamentales y básicos de una Democracia.

La Democracia se instaló para quedarse. Es el cuento más ridículo y más ruinoso que jamás nos han contado. Es cutre. Se aprovecharon de la ingenuidad de las personas, de la buena fe de la gente de bien, de ilusiones y de esperanzas, para conquistar países, palacios, territorios, e incluso a las propias personas. Y a partir de esta conquista, todo lo demás. Engaño, trile, farsa,........hipocresía, cinismo y mentira,........todo fue acompañando al cuento de que vivíamos, y vivimos en Democracia.

Pues bien; llegados a este punto, ¿qué alternativas hay, dado que la Democracia como tal ya la damos por descontada, amortizada y llegó a un punto de no retorno a una Democracia real y efectiva?
Y si pasamos de esta Democracia, ¿qué hay detrás, o más adelante?
¿Comunismo? ¿Anarquismo? ¿O sencillamente de lo que se trata es de buscar la auténtica Democracia? Y si la buscáramos, y la encontráramos, ¿seria una Democracia de la Monarquía, o se pasaría directamente a un Democracia en forma de República?

Si esto todo se pudiera desmantelar, es evidente que se tendría que pasar por una nueva transición. Esta serviría para empezar a colocar unos nuevos cimientos, y en base a la experiencia que acumulamos aquellos que hemos pasado por todo esto durante cuarenta años, casi bastaría para darle una vuelta a este sistema y buscar un mejor, empezando por una nueva Constitución y una forma de Democracia más participativa. Pero además también contaríamos con el aporte sabio que pudieran hacer estas nuevas generaciones que aterrizaron aquí cuando ya estaba todo hecho, y además nunca participaron de ninguna de las bases que se establecieron allá por los años setenta del siglo pasado. Sería una aportación muy interesante, sin duda, pues estas generaciones quizá nos sorprenderían con ideas y con conceptos que los “antiguos” quizá no contemplamos, pues la verdad es que después de haber pasado por todo lo que hemos pasado, quizá no seamos del todo objetivos, a la hora de hacer cambios o reparaciones.

En fin, que esto que nos vendieron como Democracia fue un auténtico camelo. Otras Democracias de occidente nos superan en años luz, respecto del concepto y el uso de una Democracia, por lo que ya no sirve pensar en que lo nuestro es un período de adaptación. De hecho, creo que de seguir así, que seguiremos, porque la idiosincrasia española es muy particular, jamás alcanzaríamos a los ejemplos que tenemos por el resto del mundo. Después de cuarenta años, si aún no hemos avanzado, que no lo hemos hecho, en términos democráticos, ese es un fiel indicador de que este país no cambiará jamás, por lo que sería necesario que se sometiera a consulta popular si los españoles creemos en una nueva reapertura, en cuanto a Democracia. O sea, una transición, esta vez sí, como dios manda. Y no sería malo de suyo. Más bien sería bueno, pues comenzar una nueva era, consultando al pueblo si así lo considera, supondría un paso adelante y lo que viniera después sería más sencillo a poco que se fuera coherente con el resultado y la propia acción de esa consulta.

Y si el resultado fuera negativo, respecto de cambiar a una nueva etapa en la historia de este país, entonces la cosa ya estaría más clara de lo que ahora mismo está, pues se tendrá la constancia de que España nunca cambiará. Y eso no creo que sea una buena noticia. Lo que sería, es que los españoles fuimos, somos y seremos, diferentes. Muy diferentes.

Y eso marcaría nuestro futuro. No obstante, considero que si se hiciera esa consulta, el resultado sería favorable a una nueva transición, lo que significaría que estos últimos cuarenta y dos años, habrán ido a la basura por inservibles, lo que daría muchas ideas de cara a comenzar esa nueva era histórica en España. Pero, ¿alguien se cree que esa consulta se haría, alguien se cree que si se hiciera no habría algún tipo de amaño, y alguien es capaz de imaginar que estos que ahora mangonean todo, estarían dispuestos al cambio?

Yo creo que España no tiene solución ni remedio.


Tititokokoki