Eso era hasta ahora. En los
tiempos que corren, acumular experiencia de poco, o de nada sirve. Los que
tienen el poder lo tienen todo copado, y las personas que lo saben, se rinden
ante la evidencia que les da la contundencia de los poderosos. Después están
los que no lo saben, y por último, tal como decía Noam Chomsky, están los que
ni siquiera saben que no lo saben.
Porque, cabe hacerse una pregunta
determinante y definitiva: ¿Hemos aprendido algo? Y caben dos respuestas. La
primera, es no, o al menos eso aparenta, pues si hubiéramos aprendido algo,
deberíamos aplicarlo y ser consecuentes. La segunda es que, aun a pesar de
haber aprendido algo no es posible la aplicación porque siempre ganarán ellos.
Entonces, aunque la experiencia
la aprendamos tarde, y la correspondiente aplicación de la misma sea casi
imposible, ¿de qué vale acumular experiencia si después no sabemos, o no
podemos aplicarla?
Es la conclusión a la que se llega
ante la enorme y pasmosa pasividad de la sociedad actual. Acumulamos errores,
amontonamos fracasos, coleccionamos barbaridades, pero no sacamos nada en
limpio. Porque, si así fuera, que supiéramos aplicar lo aprendido a base de
hostias y de golpes bajos, esto que ahora está pasando, y el futuro que ya
tenemos garantizado, no existirían, o como mínimo, estarían en entredicho y sin
una base tan sólida como la que tiene ahora este sistema que perdura y que
tiene visos de continuar por los siglos de los siglos.
Veamos sino: los mentirosos
siguen campando a sus anchas. Los trileros gobiernan, los falsos tiene
aceptación, los engañabobos triunfan, los comecocos y los demagogos tiene
éxito, los chorizos acumulan más riqueza a costa de la sociedad, las desigualdades
crecen, la banca hace lo que le sale de los cojones, la Constitución fracasó,
M. Rajoy “dicen” que no se sabe quién es, el partido más corrupto de Europa
gobierna la nación, hay presos políticos en la cárcel, la justicia no es para
todo el mundo igual, la riqueza está mal, e injustamente repartida, la
esclavitud va en aumento, los semovientes están jodiendo a todo el país, los
medios de comunicación engañan, la censura está vigente, y hay quien asegura,
uno entre ellos, que el franquismo está vivo y coleando, dando coces
incluso………………..
De verdad, ¿hemos aprendido algo?
¿Sirvió de algo todas estas experiencias?
¿Qué hay de la experiencia,
teóricamente, aprendida? Si de verdad existe, ¿estamos dispuestos a aplicarla?
¿Y cómo la vamos a aplicar? ¿De verdad que hemos aprendido algo?
Nota: A mi gran amigo, mentor y
maestro, Pancho.
Tititokokoki